
El rábano lunar (Raphanus sativus), el rábano rojo o el rábano temprano son los protagonistas de la primavera y un ingrediente indispensable de la ensalada primaveral.
Los rábanos limpian los riñones, el hígado y las vías respiratorias, tienen un fuerte efecto desintoxicante y ciertos efectos antitumorales.
Se pueden comer como tales, cortados en rodajas y espolvoreados con un poco de sal, zumo de limón y aceite de oliva, o añadidos a ensaladas.
Ayuda con los episodios de fiebre.

El aumento de la temperatura corporal es, hasta cierto punto, una reacción normal de las defensas del organismo contra las infecciones, pero también contra las enfermedades tumorales.
A temperaturas cercanas a los 38 grados Celsius, las células inmunes actúan de manera óptima y la mayoría de los microorganismos invasores se debilitan.
Los rábanos no inhiben esta reacción de defensa del organismo, como en el caso de las drogas sintéticas, por un descenso brusco de temperatura.
Los rábanos, por otro lado, son un muy buen tónico para el corazón y el sistema circulatorio.

Por lo tanto, ayudan al cuerpo a hacer frente a los episodios de fiebre, y ciertas sustancias activas en su composición ayudan a controlar la temperatura corporal para que no alcancen niveles peligrosos.
Deshacerse de las migrañas

Los rábanos contienen sustancias que calman los estados de excitación cerebral y tienen un efecto extremadamente favorable sobre la digestión.
Por ejemplo, cuando se producen dolores de cabeza acompañados de vómitos, regurgitación amarga en la boca, pérdida de apetito y náuseas, se consumen 2-3 rábanos crudos con el estómago vacío.
El efecto aparecerá en un máximo de 20-25 minutos.
Fuerte efecto antibiótico

Ciertas sustancias de rábano tienen un fuerte efecto antibiótico, lo que ayuda a curar rápidamente diversas infecciones que afectan los riñones, la vejiga y el tracto urinario.
Los rábanos también tienen un efecto diurético intenso, favoreciendo la eliminación del agua del organismo a través de la micción, tienen una acción antiinflamatoria sobre los riñones y la próstata.
El tratamiento con rábanos está especialmente indicado para personas que:
– retener agua en el cuerpo

– sufre nefritis, nefritis cutánea o cistitis crónica
– tiene cálculos renales o arena / aquellos que se han sometido a una cirugía u otro tratamiento para extirparlos
– para pacientes crónicos de próstata.
Por la mañana y por la noche comerás, en ayunas, una ensalada obtenida de 5 rábanos medianos, finamente picados y mezclados con un poco de aceite de oliva, vinagre de manzana y sal.

Para un mejor sabor, puede agregar unas ramitas de perejil a la ensalada. El tratamiento se realiza durante al menos 12 días seguidos.