
Las grosellas secas pueden ser un refrigerio o un postre rico en vitaminas, minerales, grasas naturales saludables.
Consumidas regularmente, las grosellas secas aportan muchos beneficios para el cuerpo y la salud.
Contienen nutrientes esenciales para la salud: antioxidantes, fibra dietética, calcio, hierro, magnesio, cobre, manganeso y potasio, vitaminas B1, B2, B3, B6, C.
Las grosellas negras secas tienen propiedades vitamínicas, antioxidantes, inmunoestimulantes, depurativas y anticancerígenas.

Regula el tránsito intestinal
La fibra dietética de las grosellas negras ayuda al funcionamiento normal del tracto digestivo. Previenen y tratan el estreñimiento, contribuyendo a un mejor tránsito intestinal y a la desintoxicación del organismo, así como a la rápida aparición de la saciedad.
Aporta las necesidades diarias de proteínas.
Una porción de 100 gramos de grosellas secas contiene alrededor de 4 gramos de proteína que es parte de todas las células y está involucrada en el desarrollo de todos los procesos vitales del cuerpo.

Prevenir el envejecimiento
Las grosellas secas son una rica fuente de antioxidantes, especialmente antocianinas, que combaten los radicales libres, oxidantes que, a medida que se acumulan en el cuerpo, pueden afectar negativamente la salud.
Fortalecen las funciones del cerebro.
El consumo regular de grosellas negras mejora las funciones cognitivas del cerebro. Estimula la actividad del sistema nervioso central, fortalece las funciones cerebrales (memoria, claridad de pensamiento, capacidad de percibir y procesar información, etc.).

Apoyan el sistema inmunológico
Las grosellas negras secas fortalecen el sistema inmunológico y ayudan a desintoxicar el cuerpo. Su acción inmunoestimuladora es especialmente eficaz, a la que se añaden los excepcionales efectos vitamínicos y remineralizantes.

Combate la inflamación en el cuerpo.
Las sustancias pécticas, los taninos y las sales de potasio de las grosellas negras tienen acción antiinflamatoria.
Aumento de la agudeza visual
Las grosellas secas aumentan la agudeza visual (incluida la visión nocturna), favorecen la corrección de ciertas deficiencias visuales. El consumo habitual está especialmente indicado en fatiga visual, miopía progresiva.

Recomendado para trastornos circulatorios.
Los frutos secos de grosella tienen efectos excepcionales sobre la circulación periférica, siendo especialmente indicados para personas que tienen las extremidades frías, incluso en la temporada de calor, así como para personas cuyos pies se hinchan con el calor, que tienen el cabello fragilizado y se magullan con mucha facilidad.
Estimula el crecimiento en los niños.
Las grosellas negras tienen efectos vitamínicos, fortalecen los huesos, aumentan la capacidad de aprendizaje y el esfuerzo intelectual. También son buenos para los niños enfermos o con retraso del crecimiento.

Trata la anemia
Las grosellas negras secas estimulan la formación de glóbulos rojos y compensan la deficiencia de hierro.
